Tras estudiarlo, el ayuntamiento no compensará a los abulenses por los 5 días en los que el agua no fue apta para el consumo. Y es que asegura el alcalde que el reglamento del agua, aprobado por unanimidad en diciembre, lo impide. Mientras, el consistorio sigue decidido a cambiar la tubería que abastece a la ciudad desde Serones. Espera que en septiembre comiencen reuniones al más alto nivel para buscar financiación.