Los campamentos son para el verano…y no sólo para los más pequeños de la casa. En Córdoba hemos encontrado uno un tanto peculiar. Allí se va a adelgazar, por eso, quienes acuden siguen un duro entrenamiento de seis horas diarias. Una fórmula que permite acabar con los kilos de más tras las vacaciones.

El día comienza corriendo, haciendo unas cuantas abdominales y dándole a los guantes. Todo con un sólo objetivo: adelgazar unos kilitos. “Unos quieren perder peso, a otros les encanta el fitness y quieren aumentar su nivel”, comenta Sarah Campell, directora de Boot Camp Spain.

Mucho les tiene que gustar porque algunos han viajado de Alemania, de Estados Unidos o desde las mismísimas antípodas. En los entrenamientos la disciplina es británica. Soldados del ejército inglés se encargan de dirigir las sesiones. Pero no todo es ejercicio, también enseñan a comer y a seguir una dieta equilibrada.

La recompensa llega al final…cuando el metro señala una talla menos.