Hay niños que son maltratados por sus padres, otros están desatendidos, incluso hay casos de abusos sexuales. Estas situaciones han llevado a la Junta a asumir su tutela.
Aunque en un centro de acogida están seguros y bien atendidos, lo ideal es que puedan crecer en un hogar.
En Castilla y León hay más de 700 niños y adolescentes en acogimiento familiar. En un primer momento la Administración intenta que esos menores convivan con abuelos, tíos u otros familiares. Sin embargo, no en todos los casos es posible. Entonces comienza otra búsqueda, la de unos padres de acogida.
En Castilla y León hay 83 menores, desde bebés hasta adolescentes, en espera de acogimiento. Entrar a una familia no es fácil. Hay muchas lágrimas por el camino pero poco a poco se convierten en risas, alegrías y momentos inolvidables. También hay alguna que otra riña. Así ha sido para María y Fernando. Generosidad en estado puro. Han sido familia de acogida en tres ocasiones. El último en llegar ha sido Raúl y acaba de cumplir 18 años. Al ser mayor de edad ha decidido continuar bajo las alas de María y Fernando hasta que pueda volar solo.